FUNDAMENTOS DEL HOSPEDAJE WEB
El
hospedaje - o alojamiento - web es como un compañero que te ayuda
en tus
aventuras en la Red. Cuando compras un dominio, obtienes un
nombre que
utilizar, pero eso no significa que estés online.
El comprar
ese nombre significa que PUEDES aparecer en la Red. No quiere
decir que
ya lo estés.
Lo que
necesitas es un hospedaje web que te brinde el espacio para estar
online.
Piensa en este servicio como una forma de tener un soporte para
cuando te
conectes. Te proveerá un espacio entre los otros sitios para que
tú también
puedas ser visto.
Con un buen
servicio de hospedaje tendrás un sitio que siempre estará
disponible
y que será capaz de manejar cualquier tipo de problemas que
puedan
surgir.
Existen
varios tipos distintos de hospedaje entre los cuales escoger, lo que
hace las
cosas un poco más difíciles.
· Hospedaje dedicado: Este tipo de hospedaje es el que utilizan los
grandes
negocios porque no quieren compartir su espacio web con
nadie más.
En otras palabras, esto significa que el sitio web se encuentra
en un
servidor privado y no comparte el espacio con nadie
más. Cuando
el servidor se cae, el único sitio afectado es el que se
encuentra en el mismo. El hospedaje dedicado
es más caro, por lo
que debes
pensarlo cuidadosamente antes de decidirte por él en tus
comienzos.
Hospedaje
compartido: Pude que quieras compartir el servidor con
otro sitio
web (u otros diez). Esta es una buena opción cuando no
tienes
mucho tráfico del que preocuparte. Por otro lado, si uno de
los sitios
del servidor compartido incremente repentinamente su
tráfico,
puede provocar que los otros sitios que se encuentran en el
mismo sean
inaccesibles. Esto significa que si el sitio A, de repente,
tiene
muchas personas visitándolo, aquellos que visiten el tuyo es
posible que
no vean nada. Es más barato que el hospedaje dedicado,
y ya sabes
por qué. Compartir el servidor es menos costoso,
pero puede
ser problemático.
· Hospedaje gratuito: Hay quien se deja tentar por el hospedaje gratuito
porque…
bueno, es gratis. Pero algunas veces recibes lo que
pagas, y
este es uno de esos casos. Aunque es posible que el hospedaje
gratuito
funcione durante un tiempo, también puede causar
muchos
problemas debido a que el servicio de atención al cliente no
sea el
deseable. Además, el alojamiento podría dejar de estar disponible
un día,
haciendo que tu sitio desaparezca de Internet.
· Proveedor de hospedaje: Si quieres complicar las cosas aun más,
puedes
crear tú mismo el alojamiento. De esta forma tendrás el espacio
que
necesitas y además podrás vendérselo a los demás. Por
supuesto,
deberás saber bastante bien lo que los hospedajes hacen,
cómo
funcionan y cómo repararlos cuando se caen.
El
hospedaje web es una de las partes más complicadas de la creación de
un sitio
web y el establecimiento de la presencia en línea. Debido a la gran
cantidad de
opciones y los factores a tener en cuenta, tomar esta decisión
puede
llevar un tiempo.
Es importante escoger un compañero en el que
puedas confiar.
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